Nadie puede dudar de que la Universiada de Invierno Granada 2015 dará un nuevo espaldarazo para nuestra tierra. Un evento que permitirá mostrar al mundo entero nuestras excelencias. El crítico y asfixiante 2011 será el cuarto mejor en cuanto a turistas se refiere, según afirmó el consejero de Turismo, Comercio y Deporte, Luciano Alonso. El retorno directo para Granada en 2015 puede ser también bestial, con la llegada de entre 30.000 o 40.000 visitantes durante las fechas de celebración del acontecimiento. Mucho más el indirecto con su proyección a los cinco continentes.
El proyecto, que unánimemente apoyaron todas las instituciones -Universidad, Ayuntamiento de Granada, Diputación Provincial, Junta de Andalucía y Estado, a través del Consejo Superior de Deportes- se ha tambaleado y ha visto peligrar su futuro. Incluso miembros de la Federación Internacional de Deporte Universitario (FISU) dejaron entrever que, de no cubrirse las infraestructuras comprometidas en Bruselas allá por el 23 de mayo de 2009, la Universiada granadina podría no celebrarse.
Los cambios en el Consejo Rector del evento dan la sensación de haber provocado un giro en el proyecto. Los principales caballos de batalla -la Villa Olímpica y el Palacio de Hielo, competencia del Ayuntamiento- están en vías de solución. El alcalde anunció que la Villa no se iba a construir porque un gasto de 65 millones de euros en El Serrallo o de 51 en la zona Norte eran inasumibles. Ahora serán los hoteles los que acojan a los deportistas, recurso que ya había aportado con anterioridad la delegada de la Junta en Granada, María José Sánchez. Lo que sí aseveró el alcalde es que el Consistorio mantiene su compromiso de construir el Palacio de Hielo, ya que lo considera como una atracción “deportiva y turística” de valor añadido y que, además, sería “útil para el futuro” y no una instalación circunstancial. Torres Hurtado dijo entonces que era “palabra de un alcalde que realiza las promesas a las que se compromete”.
La Junta de Andalucía, sin embargo, hasta ahora ha cumplido con sus compromisos. Las infraestructuras previstas en la estación de esquí ya están realizadas. La novedad más relevante para la nueva temporada es la instalación del que va a ser el half pipe (medio tubo) permanente más grande de España, que viene a completar las instalaciones comerciales y deportivas en el parque de nieve Sulayr, en Loma de Dílar, que estrenará nuevos módulos en el resto del perímetro. Estas actuaciones se unen a la pista Universiada, ya en funcionamiento desde el pasado año.
Y los populares, nuevos gestores de la Diputación, también han manifestado su interés por mantenerse en el proyecto. Su diputado delegado de Deportes, Francisco Rodríguez, en la última reunión del Consejo Rector de Granada 2015, indicó que “desde la Diputación seguimos apostando de manera importante por este evento que va a ser un revulsivo para la provincia y, en concreto, para Sierra Nevada y la capital. El compromiso de la institución provincial es gestionar y solicitar ayudas al Consejo Superior de Deportes para que colabore con la financiación de las infraestructuras vinculadas a la Universiada”. No obstante, Rodríguez tuvo un error de cálculo, ya que el revulsivo también tendría que ser para el Puerto de la Ragua y su zona, que es la competencia y el compromiso adquirido por la corporación provincial para este proyecto.
Sí, es cierto que ha habido desencuentros entre las instituciones públicas por el color político, pero si alguien piensa que no merece la pena realizar un esfuerzo por la Universiada cae en un grave error. Sería una irresponsabilidad política total y absurda. Y las instituciones privadas también tienen mucho que aportar al proyecto, porque, en definitiva, todos saldremos beneficiados. Tiempo hay para cumplir los plazos, pero mientras la Junta ya ha cumplido, Ayuntamiento y Diputación deben ponerse las pilas, así como el CSD, para que este evento ilumine aún más la Granada que deseamos.
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